El guijarro es el guijarro, y la estrella es la estrella. Pero cuando yo cojo el guijarro en mi mano y lo aprieto y lo arrojo y lo vuelvo a coger... Cuando yo lo paso y lo repaso entre mis dedos..., la estrella es la estrella, pero el guijarro es mío...Y yo lo amo!
Dulce María Loynaz
Por su amor conocerás al hombre. El amor es su fruto natural, el más suyo, el más liberado de su ambiente.
ResponderEliminarEl amor es el fruto del hombre y también su signo, el amor lo marca como un hierro encendido y nos lo deja conocer, distinguir, entresacar...
Dulce María Loynaz, Poema XXII, fragmento